Creo que ya no hay nadie que lea esto, hoy me concentro en mi, en mi persona, en mi vida, mis metas, mis logros, en como veo la vida, en como ha pasado la vida desde aquel dia en que nací y hoy 28 años después veo como me ha cambiado la vida, como me he moldeado según las vivencias que he tenido, como han habido tantas cosas que me han determinado y cuanto trabajo me ha costado levantarme.
Se que no estoy solo, se que tengo a mi alrededor a mucha gente que me quiere, pero en verdad no se que pasa a veces por mi cabeza que eso no es suficiente, padezco constantemente de una maldita depre que parece que la infeliz no se quiere ir jamás.
La vida debería ser sencilla, agradable, amena, y, por qué no, chusca y coqueta, pero aqui viene el ser humano a integrar su 'human nature' para darnos en la madre unos a otros, para ver como vivimos todo el tiempo en una competencia, que quien es mas inteligente, quien tiene mejor trabajo, quien gana mas, quien trae el mejor coche, la mejor vieja, la mejor casa, etc., etc., y vivimos inmersos en un mundo material donde lo espiritual pasa de largo y pocas veces se asoma.
No tengo idea de por qué carajos estoy escribiendo esto, es un día ordinario, son las 2 de la mañana y, para variar, el insomio me tiene presa de él, debrayando barato pensando en que mi vida es un pantano y que no se como cambiarla.
No se si realmente alguien leerá esto algún día, no es la intención de hecho, creo que hoy este post es sólo para mí, para recordarme que aún hay muchas heridas viejas que no han querido sanar (o no he querido que sanen) y que, por si esto no fuera suficiente, me he mutilado lentamente miles de heridas nuevas y que a como lastiman las cabronas.
Definitivamente no estoy en el mejor momento de mi vida y me cuesta tanto trabajo aceptar los errores que he cometido... me cuesta tanto verme al espejo y decir 'guey la estas cagando' mmm no, mas bien eso es fácil, se que tengo varios errores y que muchos de ellos se han tronado crónicos, creo que el verdadero problema es que no he hecho ni madres para solucionarlos, se cuales son, muchas veces hasta cual es el origen, pero no he hecho nada por atacarlos y permitir que esas heridas tanto viejas como nuevas empiecen a cerrar y me permitan tener una vida mas relajada.
No se que pasará mañana, solo le pido a Dios que no se pare sus manos de las mías, que en algún momento me permita encontrar la luz al final del túnel, la ventana que siempre deja abierta, esa que decían las abuelas que se abría cuando Dios ya nos había cerrado todas las puertas.
Creo que ahora será el momento en que en ésta intimidad que tengo conmigo mismo en este espacio trate de ir sacando esas heridas, espero que sanen y si no al menos espero que empiecen a doler menos.
La vida continúa y yo... yo estoy obligado a mejorar.